Hola a todos, hoy traigo una nueva entrada poco convencional acerca de algo
no menos que inusual en la actualidad narrativa de los libros románticos: cómo
hacer frente a una escena de sexo.
Ante todo, quiero dejar claro que yo sólo soy una simple escritora novel a
la que apenas nadie lee. Y añado el "apenas" porque si no, las cosas
como son, mi currículum de escritora sería muy triste. Centrándome en el tema
principal de esta entrada, os diré, que a mi juicio, una escena de sexo tiene
que tener tres elementos indispensables:
1. La química entre los
personajes
2. El cuerpo
3. El lenguaje
La química entre los personajes
Si no hay química entre nuestros protagonistas, no tenemos nada. Los
personajes de nuestra novela tienen que tener personalidades que se atraigan, y
eso, vamos a conseguirlo dotándolos de la personalidad adecuada. No
importa la técnica que utilicemos: "Los polos opuestos se
atraen", "chica buena conoce a chico malo", "chica inocente
se enamora del playboy de turno" o "mujer de armas tomar choca con
hombre de fuerte carácter", como verás, las posibilidades son infinitas, y
la personalidad de nuestros personajes dependerá, en mayor medida, de la
personalidad de la pareja que le hayamos buscado.
Tenemos que conseguir que nuestros lectores disfruten, sufran y se
emocionen con la relación de nuestros personajes. Que vean creíble la relación
que hemos ideado. Si creamos dos personajes entre los que la química brilla por
su ausencia, nuestra novela, con toda seguridad, será un fracaso.
Necesitamos:
-Miradas que lo digan todo: Todos sabemos que cuando la persona de la que
estás enamorado te mira, nuestro mundo se paraliza. Las miradas se clavan
en el alma. Los ojos seducen y enamoran. Las miradas lo dicen todo.
¡Pero cuidado! Si abusas demasiado de este recurso, puedes llegar a
resultar pesado para el lector. Con que expliques un par de veces lo que
sintieron los amantes cuando se conocieron, o cuando hicieron el amor la
primera vez y se miraron a los ojos, es suficiente.
-Diálogos chispeantes: de nada nos sirve tener dos personajes que se lo
dicen todo con la mirada si luego se callan las palabras. Los amantes ríen,
discuten, gritan, se pelean y se reconcilian, se dicen te quiero y muchas más
cosas. En el sexo, los personajes hablan con voz ronca o apasionada, susurran
al oído y se dicen cosas, un tanto soeces, que en otro momento se callarían.
¡No seas cursi! pero tampoco te conviertas en un depravado. El término
medio es lo correcto, aunque lo cierto es que nadie mejor que tú conoce a tus
personajes. Si el chico es tímido no va a decir a la primera de cambio cosas
apasionadas. Si la mujer tiene un carácter fuerte, no va a decir “te amo” en un
principio.
El cuerpo
Uno de los factores que más influye en la atracción que siente un personaje
hacia otro es el físico. Seamos sinceros, nadie se siente atraído por una
persona que le resulta desagradable a la vista, ¡Ojo! No estoy diciendo que
nuestra protagonista sea una modelo de Victoria Secret, o que nuestro Adonis de
turno se dedique a anunciar calzoncillos de Calvin Klein que luzca sin usar
relleno. Lo que intento explicar es que los personajes se tienen que GUSTAR.
Atraerse físicamente.
La chica puede ser curvilínea o gordita, pero al hombre le puede resultar
la mujer más arrebatadoramente sexy que haya conocido en su vida, ¿Entiendes?
Y esta atracción se demuestra. No te limites al típico y aburrido misionero
en el que los cuerpos yacen inertes en la cama, como si en vez de follar, y
perdóname la expresión, estuvieran mirando al techo. Los cuerpos se tocan y se
encienden. La piel se ruboriza, se enrojece. El cabello se alborota. Las uñas
se clavan en la espalda del otro. Los cuerpos sudan. Los labios se besan.
No me voy a poner a enumerar ejemplos de prácticas eróticas que puedes
reflejar en tu novela, lo que sí haré es aconsejarte una cosa: no seas
repetitivo. Lo mismo cansa.
¡Y por favor! Ya basta de penes tan grandes y majestuosos. En serio, el
tamaño medio del pene en erección es de 13,58 centímetros. No digo que no haya
machos superdotados en la vida , pero cuando un amplio porcentaje de novelas
dedica páginas y páginas a describir el gran tamaño del miembro viril del protagonista, eso resulta manido.
Seamos realistas.
El lenguaje
Aquí, probablemente, encuentre varias opiniones dispares. Lo cierto es que
en la narración de una escena con contenido erótico podemos elegir entre varias
posibilidades:
-Hablar metafóricamente, o lo que es lo mismo: no llamar a las cosas por su
nombre. Lo siento, pero cuando leo pavadas tales como "derramó su simiente
cálido dentro de ella", me quedo muerta.
-Lenguaje mixto: en este caso, utilizamos un lenguaje que hable con
exactitud, pero en el que a veces, dejemos caer alguna metáfora mediante la que
introducimos sentimientos. Por ejemplo:
"Jack tomó el pezón rosado de ella entre sus labios, hasta que la
punta se volvió tensa bajo las acometidas de su lengua( lenguaje exacto). Ella
era dulce como la miel, y cuando él la probaba, sentía que había encontrado a
la compañera perfecta. La mujer por la que merecía la pena luchar (lenguaje apasionado
o llámalo como quieras)
-Lenguaje exacto: es decir, nos limitaremos a narrar con todo lujo de
detalles lo que sucede entre los protagonistas, y llamaremos a las cosas por su
nombre. El problema es que a veces la narración puede vulgarizarse en exceso,
por lo que recomiendo que si utilizas esta técnica, no abuses de ciertos
términos que pueden terminar cansando o incomodando al lector. Es una novela
erótica, no porno.
Por último, me gustaría puntualizar una cosa. Estoy agradecida a ciertos
autores que con su talento y su buen hacer, han contribuido a que hoy, ciertas
personas como yo, podamos escribir novela romántica con pinceladas eróticas sin
que cierto sector conservador se nos eche encima. El sexo, amigos míos, es tan
normal como la vida misma. No es algo que deba ser ocultado, censurado o
restringido. Y aunque aún estamos muy lejos de hablar de sexo con normalidad, o
de que ciertas señoras lleven la portada de su libro romántico cubierta por
papel de regalo, la verdad es que la literatura romántica ha evolucionado
mucho. Y si no, basta con echar un vistazo a los best seller y observar en qué
posición están libros como "Pídeme lo que quieras" o la famosa
trilogía de Christian Grey.
Espero haberos ayudado, y por supuesto, acepto leer las técnicas que
vosotros utilizáis. No hay otra manera de aprender que la de aceptar las
críticas constructivas.
Un beso!
Muy buena tu entrada, me ha gustado mucho! La comparto en el Twitter @TentempieLitera
ResponderEliminarUn beso!
http://tentempieliterario.blogspot.com.es/
Muchas gracias!!
ResponderEliminarUn beso!
Me ha encantado, estoy en proceso de escribir una historiia con contenido sexual y Rut enterada me ha ayudado bastante, muchas gracias.
ResponderEliminarme encanta esto
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarOh, gracias. Sentia que le faltaba algo a la escena que estoy escribiendo y era justamente eso; Las miradas, el sentimiento de pasión
ResponderEliminar¡Gracias, luego te invitare a leer mi historia "El deseo prohibido de Mia" En wattpad